lunes, 26 de julio de 2010

ASFIXIA -------- Thrash Metal------ESPAÑA




Mientras los litros de alcohol desparramaban por el suelo, Manu intentaba no morir asfixiado, pues el alcohol y la risa paranoica le habían jugado una mala pasada. Desde entonces y hasta día de hoy, un nuevo grupo de Thrash Metal sería bautizado con el nombre de ASFIXIA.

Nadie del exterior supo confiar en él, todos crucificamos su capacidad musical, pero pronto la vida iba a darnos una patada en la boca.

Apareció Juanma Bogart, un gran guitarra rítmica, prestándole su apoyo y aportando buenas ideas a las composiciones que día a día, mes a mes, trabajaba el insaciable.
Seguía faltando batera, pero las composiciones avanzaban, y parecía tomar forma una nueva manera de hacer THRASH. Aunque todavía amenazaban muchos días sin conciliar el sueño, la vida y sus jodidas causalidades, hizo que Ginés entrara a la formación.

Su locura apenas parecía tener medida, la lengua no menguaba, las palabras se entrelazaban con pura filosofía e indudable inteligencia, la personalidad se hacía participe en cada milímetro de su cuerpo. Como no podía ser de otro modo, un genio se introdujo, armado con grandes ideas, en Asfixia.

La formación cogía forma y empezaba a recrearse con buenas dosis de violencia. Mientras Manulator, más cerca que nunca de su sueño, maquinaba nuevas y enérgicas composiciones.

Pero.. faltaba algo, quizá, otro guitarra. Asomándose por un estúpido y desesperado anuncio en un foro de la gran telaraña, Mac buscaba de nuevo formación. Tras intentar varios intentos fallidos en proyectos propios y ajenos optó por poner un anuncio y probar de nuevo suerte, temiendo a la desgana, y a la amenazante idea de abandono total que rondaba por su caótica cabeza. Decidido, fue Manulator, quién tendió su mano para que él subiera de nuevo al tren que un día abandonó.

La formación estaba completa. Pero la vida pretendía demostrar quién mandaba, y las adversidades golpearon rotundas a la formación. En Junio del 2006, Juanma Bogart desapareció desorientando a todos los que le rodeaban. Ni si quiera la policía, supo ni quiso encontrarle.

La desolación no hizo prisioneros esta vez, y los tres pilares que soportaban ASFIXIA, continuaron mas convencidos si cabe, recorriendo un abrupto sendero, sin duda, digno de ser explorado.
Así fue, hasta la inesperada vuelta de Bogart. Algunos ya habíamos coloreado su lápida e imaginado la más cruel de las muertes, pero volvió con una historía bajo el brazo digna de ser contada a sus nietos. Como no, la gente de ASFIXIA olvidó su original enfado y reorganizó el cuarteto, dispuestos a ensayar y a realizar una grabación decente de aquellas ideas que Manulator y Juanma Bogart compusieron casi un año antes.

Los ensayos empezarón a inyectar su veneno en dos personas con una visión de la música diferente. Las discursiones no se quedaron tan solo encerradas entre las polvorientas paredes el ensayo, y con el transcurso de los días la relación entre Ginés y Manulator se desmoronó. Apenas podían mediar palabra alguna, sin despellejarse verbalmente y rociarse los oídos de podrida basura.

La presión no hizo un grato favor. Ginés se bajó del vagón y el grupo, ya sin él, abandonó los ensayos y se metió de lleno en la grabación de THE WORLD IS OVER. Las cosas iban quedando bien, se seleccionaron seis temas compuestos por Manulator y la ayuda de Bogart, más otros dos de Mac.

El pequeño gran Bogart, también dejó Asfixia antes de concluir con la grabación. Dicen las malas lenguas, que el Thrash dejó de atraerle. En mi opinión la vida empezó a mostrarle que las 24 horas que ofrece un puto día, no son suficientes para una mierda. En cuanto el esclavo trabajo te da bien por el culo, debes elegir que cosas dejas y que cosas quitas de tu vida. Ahora ya sabemos cual fue su elección.

Manulator y Mac finalizaron la grabación. Miraban cada cuál a su espejo, observaron detenidamente. ¡Joder! Todo había vuelto al principio, como en aquella noche donde Manulator luchaba por no morir asfixiado, y Mac se descojonaba a su lado rodeados de colegas. Aquella noche que tenían claro que iban a hacer un grupo de thrash. El primero hizo de maquinista de la bestia Asfixia, y fue recogiendo las migajas que la batidora vida iba dejando hasta volver al principio. ¿Asfixia sólo había sido un sueño? ¿acaso había terminado todo?. Los espejos se desquebrajaron, sus manos sangraban, y la sonrisa de sus bocas confirmaba que todo acababa de comenzar, The World Is Over estaba terminado.

Y como habiendo superado el mayor de los obstáculos, todo fue yendo sobre ruedas. Las críticas superaron todas las expectativas, la aceptación fue rotunda. Y desde Perú, armado con sus viejas baquetas, llegó Jorge desbordante de talento y experiencia; y casi a la par, Marcos desde un barrio de lo más acojonador, que no acojedor, trajo de su brazo a la seis cuerdas en una vieja funda de bajo.

Marcos se afianzó como el más veterano del grupo, dispuesto a demostrar que tenía cojones, calidad y actitud suficientes para defender el nuevo trabajo, y Jorge, ahora el más joven, vacilante apostó muy fuerte dispuesto a llegar hasta el final.
Asfixia son: Manulator, Mac, Marcos y Jorge.

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